Rodeada de los majestuosos cerros orientales y ciudad donde convergen todas las culturas del país, es la capital y principal centro administrativo de Colombia, alberga la sede del gobierno y tiene bien segmentadas las zonas industriales, comerciales, residenciales y turísticas.
Bogotá cuenta con una infraestructura moderna en los sectores residenciales más exclusivos de la ciudad, así como en los principales centros empresariales al norte de la ciudad y por el corredor vial de la calle 26. Para el visitante hay zonas bien determinadas que ofrecen una gran variedad de restaurantes de comida internacional y bares nocturnos, principalmente localizados al norte de la ciudad, en la Zona T, la Zona G, Usaquén, y alrededor del parque de la 93. Bogotá ofrece al turista una gran variedad de museos entre los que sobresalen el Museo Nacional que alberga colecciones de arte, historia y arqueología; el Museo del Oro con más de 35.000 piezas de oro y objetos representativos de la orfebrería prehispánica.
Los sitios turísticos tradicionales son la Plaza de Bolívar y el Chorro de Quevedo en la zona de La Candelaria, sector del centro de la ciudad en el cual los visitantes pueden caminar admirando la arquitectura colonial que ha sido muy bien conservada. Bogotá está rodeada por los Cerros Orientales que le permiten a sus habitantes tener un momento agradable de paz y tranquilidad rodeado de naturaleza; Monserrate es el cerro más conocido por su basílica dedicada al Señor de Monserrate, que se levanta al centro de la ciudad, desde donde se puede disfrutar de una hermosa vista de la ciudad.
Así mismo cuenta con corredores viales que te permitirán trasladarte a municipios o ciudades pequeñas cercanas como Chía (con restaurantes famosos y el parque temático Jaime Duque), Guatavita (famosa por su laguna y la leyenda de El Dorado) y Suesca en donde se puede realizar espeleología y escalar sus montañas rocosas. Por último, cabe resaltar que sobre los mismos corredores se puede llegar a visitar las maravillosas minas de sal de Nemocón y Zipaquirá con más de 200 años de antigüedad.
De este modo, Bogotá ofrece a sus visitantes un sinfín de posibilidades turísticas, de diversión y trabajo empresarial. Bogotá, 2600 metros más cerca de las estrellas.
Monserrate es uno de los patrimonios culturales más importantes de la capital colombiana. En este lugar hay un santuario religioso ubicado a 3.152 metros sobre el nivel del mar, desde donde se puede observar la ciudad de Bogotá. Este santuario se convirtió en punto de peregrinación con ruta hacia la capilla en donde reside El Señor Caído, obra de Pedro de Lugo y Albarracín.
Además de ser un centro de reflexión, el Cerro de Monserrate también es un epicentro de cultura y gastronomía. Allí se realizan diversos conciertos en diferentes temporadas del año.
Para subir existen dos medios de transporte: el funicular y el teleférico y las boletas se venden en la base del cerro.
Sus calles estrechas y empinadas, sus casonas con tejados y aleros coloniales fueron cuna y aposento de la aristocracia criolla y española. Para apreciar La Candelaria hay que estar atentos a infinidad de detalles: puertas y emblemas de la época colonial, zaguanes, balcones, ventanas ornamentadas y desde luego, sus habitantes que fluctúan entre los viejos “rolos” y “cachacos”, y una población joven ligada a actividades académicas y culturales. En este sector, podrás encontrar sitios culturales y turísticos como el Museo del Oro, la Casa del Florero, la Casa de la Moneda, la Plaza de Bolívar, el Teatro Colón, el Chorro de Quevedo, entre otras. Este es un sector en donde están ubicados inmuebles que son considerados bienes de interés cultural, por esto es importante tener en cuenta que todo acto que cause cambios al bien de interés cultural o que afecte el estado del mismo es considerado un delito en nuestro país por lo cual están establecidas penas legales y administrativas.
Delicioso caldo típico tradicional de la mesa bogotana. Es preparado con leche, huevo y cilantro que se sirve para el desayuno y se acompaña con tajadas de pan con mantequilla o con los famosos calados bogotanos.
El Ajiaco Bogotano o Santafereño consiste en una sopa de pollo que contiene diferentes tipos de papa, mazorca de maíz tierno y se puede servir sola o con crema de leche y alcaparras encurtidas, generalmente en tazones de barro cocido. Por el importante rol cultural que juega, se le considera una tradición santafereña.
